miércoles, enero 17, 2007

"quiero ser agente federal"


Elvis Presley se presentó en 1970 en la Casa Blanca, sin previo aviso, para reunirse con Nixon, a quien regaló un revólver y pidió una placa de policía
Caprichoso y extravagante como siempre, Elvis Presley se presentó el 21 de diciembre de 1970 en la puerta de la Casa Blanca para reunirse con Richard Nixon y con la pretensión de obtener una placa de agente federal. El contenido de aquel encuentro ha sido desclasificado. El Rey del Rock explicó al entonces presidente su capacidad para luchar contra las drogas desde su posición y le regaló un revólver con siete balas de plata.


Richard Nixon y Elvis Presley posan en la Casa Blanca tras su sorprendente encuentro.

El contenido de la reunión secreta que mantuvo Richard Nixon con Elvis Presley en 1970 ha sido desclasificado. El caprichoso Rey del Rock se empeñó en aquella época en mantener un encuentro con el presidente de EE UU para pedirle una chapa de agente federal para «luchar contra la influencia de las drogas en los jóvenes» y no cesó en su empeño hasta conseguirlo. Elvis se presentó en la Casa Blanca sin pedir cita, y dos horas después estaba en el despacho oval reunido con Nixon. El 21 de diciembre de 1970, Elvis emprendió camino a Washington. Los agentes que protegían la Casa Blanca se vieron sorprendidos cuando un grupo de hombres se acercaban hasta las puertas, según relató ayer "el País". Tras ellos aparecía Elvis Presley, quién les entregó una carta para el presidente Nixon. Los agentes llamaron a la oficina presidencial: «Que ha llegado el Rey», le espetaron al consejero presidencial Bud Krogh. Este, sorprendido, respondió: «Pero si hoy no esperamos a ningún monarca...». «No, no. El Rey del Rock. Está aquí, en la puerta», aclararon los agentes. Krogh se reunió con Elvis y le pidió que se fuera a su hotel, que le llamarían a lo largo de la tarde. En la misiva que llegó a Nixon, llena de imprecisiones y errores, Elvis expresaba su admiración por el trabajo del Presidente y su preocupación por la situación de los jóvenes estadounidenses, el uso de las drogas, la ideología izquierdista de los estudiantes demócratas o los movimientos de defensa de los derechos para los negros. Elvis afirma que desde su posición puede ayudar al país al que ama, aunque para eso le pide su ansiada chapa de agente federal. Concluye la carta dejándole su número de teléfono y diciendo que si finalmente se reúnen, tiene un regalo para él. Dos horas después, Elvis llegaba de nuevo a la Casa Blanca, donde Nixon, con su traje, le esperaba. El Rey del Rock, sin embargo, apareció con sus pantalones ajustados de terciopelo morado, su clásico cinturón con una gigantesca hebilla, una camisa con cuello de pico, chaleco corto y una capa. En aquella reunión, Elvis le relató a Nixon su alarma ante la mala influencia de los "Beatles" para EE UU, también de cómo podía influir en los jóvenes en contra de las drogas, y después le pidió a Nixon la chapa de agente federal. El presidente aceptó, y le dieron una improvisada placa dos horas más tarde. El regalo que el Rey del Rock le entregó a Nixon fue un revólver "Colt 45", muestra de su espíritu pacificador, con siete balas de plata en el cargador.
Bueno por fin vuelvo a escribir, lo leí ayer en la opinión y me pareció bastante interesante. un saludo.

Etiquetas: